Gracias al trabajo articulado entre la Universidad Autónoma de Bucaramanga (UNAB), y la Fundación Oftalmológica de Santander – FOSCAL, médicos, profesores e ingenieros trabajaron en el diseño y prototipado de dos clases de ventiladores mecánicos que pueden ser usados, tanto en las áreas de urgencias como en las unidades de cuidados intensivos (UCI), para la atención de pacientes con complicaciones pulmonares a causa del COVID-19.

Estos dispositivos permitirán la inyección de volúmenes controlados de oxígeno al paciente, con el fin de reducir el esfuerzo necesario para la activación de los músculos presentes en la respiración, realizando el intercambio gaseoso, mediando la salida de gases como el CO2 del organismo, e inyectando volúmenes establecidos de O2, lo que se convertirá en una herramienta de trabajo fundamental ad-portas de la evolución estimada del COVID-19 en Santander.

De acuerdo con César Guerrero – Director de Investigaciones de la Universidad Autónoma de Bucaramanga “el desarrollo del prototipo de ventilador mecánico es importante por las siguientes razones: en primer lugar, porque responde de manera inmediata a una coyuntura, como es la necesidad de tener una solución a la problemática de las UCI en el país. Por otro lado, la presión que ha generado la pandemia ha permitido una transformación para las universidades al entender que es posible generar soluciones y desarrollos tecnológicos en un corto tiempo. Finalmente, es fundamental porque los investigadores viven el proceso de lo que implica la realidad de llevar desde la investigación hasta la implementación real un proyecto, específicamente en soluciones para la salud, al cumplir con los requerimientos del INVIMA, lo cual conlleva a un aprendizaje acelerado en el proceso de transferencia tecnológica”.

El proyecto tuvo como aliado estratégico a la Universidad Cooperativa de Colombia, seccional Bucaramanga, y se espera que beneficie a la comunidad en general.
 
Conoce la ficha general del proyecto aquí